Papá Noel pasó por Parada en víspera de Navidad para compartir juegos y regalos con todos los niños

Evaristo Gómez

En la tarde del 23 de diciembre Papá Noel se abrió paso en la Casa de la Cultura-O Feirón, en la parroquia de Parada, para compartir con todos los niños y niñas de este entrañable e histórico sitio un momento de juegos y regalos que quedará ya sin duda en la memoria de los más pequeños y de sus padres, todo ello en un lugar donde las fiestas al cabo del año llegan casi siempre en ocasiones muy contadas, y donde los rigores y la penurias y la lucha del día a día suelen ser los compañeros de jornada de casi todos aquellos que se dieron cita en un local abarrotado de ilusión y entrega.

Papá Noel visitó por adelantado a esta gente y no se puede decir que cayera en el olvido. Más bien al contrario y contra todo pronóstico, sin ayuda apenas –incluido el mismísimo Concello de A Cañiza que ni se preocupó de desplazar hasta allí a su responsable de Juventud- , los miembros de la Asociación de Vecinos de Parada (léase Manolo Meriño, María Parada, Belén,…) organizaron echando mano del arrojo y la imaginación el I Nadal con Papá Noel en Parada, conjuntamente con la Asociación Gran Vigo con su presidenta Nelly Pérez Giráldez, siendo capaces de congregar alrededor de 300 personas, entre chavales y adultos, los cuales recibieron un buen puñado de presentes, a la vez que disfrutaron de entretenidas y simpáticas actuaciones como cuentacuentos, personajes del mundo del teatro, gaiteiros…, tan relevantes como Manolo Solla, Xosé Manuel Conde, Roberto Giráldez; la pandereteira, Mónica Guimaró, y Fernando Älvarez, que no cejó al tambor.

Tampoco cabe olvidar la nómina de voluntarios que fueron de la partida para que todo este fenomenal jolgorio fuese finalmente el éxito que fue. Entre ellos, Breogán Gómez Giráldez, Marcos Alvarez, Rubén Meiriño, Albero Castro Parada o César (Presidente de la Comunidad de Montes de Parada), entre otros.…, sin marginar la impagable colaboración de Dolores, excelente cocinera, que se encargó de preparar unos exquisitos pinchos con los que se les obsequió a los asistentes al final del acto, y que bien merecido los tenían.

A los más pequeños se les entregaron aproximadamente 1000 regalos, que si juguetes, que si tractores, que si coches, que si mochilas, peluches, muñecas…. y sus mayores, los padres y abuelos de aquellos, tampoco se quedaron sin su detallito navideño en Parada, de un Papá Noel que celebró la Nochebuena y la Navidad con todas estas familias como anticipo a la jornada cuando el hombre de larga barba blanca, embutido en rojo, se descuelgue por las chimeneas para depositar los regalos para los niños y niñas de ese precioso rincón gallego, porque han sido buenos durante este año que ya se apea del camino de la vida que, nos guste o no, debe continuar siendo recorrido por cada uno de nosotros.

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