martes, 20 de octubre de 2009

I Torneo de Futbolín, Tute, Subastado, Dominó y Escoba de la AVV de Parada

La Asociación de Vecinos de Parada organiza un Torneo de juegos de Mesa y Futbolín, cuyos trofeos y premios fueron patrocinados por el periódico EL FORO.

La Asociación de Vecinos, con el patrocinio del periódico EL FORO - Agradecemos a Nelly Pérez Giráldez esta ayuda -, organiza el I Torneo de Tute, Subastado, Escoba, Dominó y Futbolín, que se está celebrando en el Chiringuito de la Playa Fluvial de Parada con una gran afluencia de participantes de la parroquia e incluso de otras partes.
Las parejas ganadoras en las actividades del Torneo, celebradas hasta el momento, han sido:

En Futbolín. Albino y José
En Tute: Manolo y Marcial
En Subastado: Pires y Merchi

El trofeo de Dominó se disputará el próximo sábado día 24 del presente mes de octubre, mientras que el de Escoba quedará para el sábado día 31 coincidiendo con la celebración de magosto, en el que participan una buena parte de los vecinos aportanto cada uno: castañas, chorizos, vinos, etc., mientras otros recogen la foupa, ... de tal forma que se convierte, el magosto, en una romeria de confratenidad.

Los premios, patrocinados por el periódico EL FORO, Nelly, serán entregados el día que finalice dicho torneo, o sea el día 31.

Felicitamos a todos los participantes en LOS JUEGOS DE MESA, que son una forma de ocio alternativo, social y cultural, para personas de todas las edades. Esta clase de juegos han estado presentes durante toda la historia de la humanidad. En España, en Galicia y aquí en Parada ha habido siempre una afición establecida a algunos juegos, y a los tradicionales juegos de mesa como las cartas, el dominó, el ajedrez, etc., por que jugar es divertirse. Y el ocio y la diversión son para todas las edades. Una partida de un juego de mesa es un acto social entre amigos, en lo que lo más importante son las personas con las que se juega y el tiempo que disfrutan juntas, no sólo el juego en sí.

En este primer torneo, hemos optado por el juego de cartas, el dominó y por un juego que utilizan con frecuencia los más jóvenes: el futbolín.

martes, 13 de octubre de 2009

A Cañiza disfruta del I CAMPEONATO DE ESPAÑA DE PERROS DE RASTREO

LA COCAÍNA Y EL MEDIO AMBIENTE

Breogán Gómez – Giráldez Pérez

EL CONSUMO DE COCAÍNA INCREMENTA EL RIESGO DE SUICIDIO

MEDIO AMBIENTE: A CAÑIZA PADECE UN PROBLEMA POR NO TRATAR ADECUADAMENTE LAS AGUAS RESIDUALES


Los jóvenes vulnerables a los trastornos mentales son los más afectados por el aumento del riesgo de suicidio causado por el consumo de esta sustancia ilegal.

En A Cañiza existe cierto consumo de cocaína, sustancia que puede producir episodios agudos de euforia, seguidos por cuadros depresivos. Especialmente, las personas más vulnerables pueden tener depresiones tras el consumo de cocaína, lo que acaba incrementándolo y dificultando la abstinencia a la droga.

El consumo de cocaína deteriora la salud mental. Numerosos estudios lo han demostrado. Además, según el Observatorio Europeo de las Drogas, algunos Estados de la UE (Unión Europea) han experimentado en los últimos años un incremento sustancial de la demanda de tratamientos por consumo de cocaína. En efecto, la cocaína es la segunda droga ilegal más consumida en Europa.

En España, en concreto, según el OED (Observatorio Español sobre Drogas) la prevalencia del consumo de esta sustancia en la población de 15-64 años ha pasado de 1,8 en 1995 a 3,0 en 2008. Este porcentaje de consumo representa el consumo en los últimos doce meses, puesto que el esporádico –alguna vez en la vida- se eleva hasta el 8%. La edad media de inicio de consumo se sitúa en torno a los 21 años. Existe una gran diversidad en cuanto a las características de los consumidores. Desde algunos de los miembros más privilegiados de la sociedad hasta los más marginados. Éste es tres veces mayor en hombres que en mujeres.

Diferentes pautas de consumo

Por consiguiente, las pautas de consumo de cocaína pueden ser diversas, desde un consumo ocasional y recreativo hasta un consumo altamente compulsivo y dependiente. Además, según los psiquiatras, los pacientes con enfermedades graves tales como psicosis, trastorno bipolar o depresiones, y que además consumen cocaína, son más difíciles de tratar que los que no consumen esta droga.

Los vínculos entre el deterioro de la salud mental y el consumo de cocaína están más que probados, lo cual no parece haber evitado que la tendencia de aumento en lo que respecta a la prevalencia de consumo en los últimos doce meses de esta sustancia se haya estabilizado en uno de los porcentajes más altos del mundo (3%). Y es que, desafortunadamente, la cocaína tiene un alto poder adictivo, y desafortunadamente, se consume como droga de recreo.

LAS AGUAS RESIDUALES

Por otro lado tenemos el tema de la contaminación, sobre todo de las aguas, y en ello colaboran casi todos los municipios. Para muestra un botón: Ver el río Deba.

Pese a las advertencia de la Comisión Europea, que constantemente remite a por escrito por no haber dado cumplimiento a alguna sentencia sobre el tratamiento de las aguas residuales, España y en concreto algunos municipios no han tomado las medidas necesarias para atajar el problema, por lo que la Comisión podría llevarla de nuevo ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas y solicitar que se le imponga una multa.

Las aguas residuales urbanas no tratadas son una amenaza para los ciudadanos y perjudican la calidad ambiental de los ríos, lagos y aguas costeras. Por ello se insta a España y a todos los municipios que contaminan a enmendarse rápidamente. De lo contrario, la Comisión podría pedir al Tribunal que la obligue a pagar una multa.

Con arreglo a la Directiva sobre las aguas residuales urbanas, los municipios deben disponer de sistemas adecuados de recogida y tratamiento de aguas residuales. Según la información proporcionada a España por la Comisión, existen retrasos y lagunas importantes en la adopción de las medidas necesarias para la recogida y tratamiento correctos de las aguas residuales, lo que constituye una violación directa de la sentencia del TJCE. Mientras que el plan de obras sigue sin estar claro, se vierten aguas residuales en el medio ambiente, motivo por el cual la Comisión remite a España un segundo apercibimiento por escrito. En caso de que no dé pleno cumplimiento a la sentencia dictada, la Comisión podría de nuevo llevar el asunto ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas para pedirle la imposición de una multa.

Las aguas residuales no tratadas pueden estar contaminadas por bacterias y por virus nocivos y presentar así un riesgo para la salud pública. Asimismo, contienen nutrientes como nitrógeno y fósforo, capaces de dañar las aguas dulces, caso del río Deba, y el medio marino favoreciendo la proliferación de algas que asfixian otras formas de vida, fenómeno denominado eutrofización.

El principal tratamiento de las aguas residuales previsto por la Directiva es de tipo biológico o «secundario». Las infraestructuras correspondientes debían estar en funcionamiento a más tardar el 31 de diciembre de 2000. Cuando las aguas residuales se vierten en masas de agua denominadas «sensibles», la Directiva obliga a efectuar el tratamiento «terciario», más estricto, que incluye la eliminación del fósforo y/o el nitrógeno y que tendría que haber estado a punto, a más tardar, el 31 de diciembre de 1998.

Procedimiento jurídico

El artículo 226 del Tratado habilita a la Comisión para incoar un procedimiento jurídico contra los Estados miembros que incumplan sus obligaciones.

El artículo 228 del Tratado habilita a la Comisión a actuar contra los Estados miembros que hayan incumplido una sentencia del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas. Este artículo permite igualmente a la Comisión solicitar al Tribunal que imponga sanciones financieras al Estado miembro en cuestión.

Caza e Cabalos en Parada



jueves, 1 de octubre de 2009

La maduración de la uva

GECMA DE A Cañiza-Breogán Gómez de Giráldez Pérez

El clima, la luz o la temperatura influyen en la madurez de la baya y, por lo tanto, en el resultado final del vino

De la uva "Vitis Vinifera" se obtiene vino mediante la fermentación alcohólica del mosto. Este proceso se produce por la acción de las levaduras, que transforman el azúcar del fruto en alcohol y el gas, en dióxido de carbono. En el resultado final influyen el clima, la altura, la luz o la latitud y la materia prima utilizada durante el proceso de elaboración. En función del momento en el que se recoge la uva, la calidad varía: si está verde, no aporta color al vino (vinos blancos); si está sobremadurada, se obtienen caldos sin acidez.

La maduración de la uva es la etapa en la que se constituye la baya apta para consumir el fruto fresco o para vinificación. Varios factores afectan a su desarrollo: el tipo de suelo, el efecto del mismo sobre la disponibilidad hídrica y nutricional, el clima de la zona o su efecto térmico y lumínico. Estos aspectos pueden provocar trastornos durante su maduración o síntesis de compuestos y afectar al proceso de elaboración del futuro vino.

El punto de madurez se alcanza en unos dos meses. Esta etapa, conocida como envero, supone el cambio de color del fruto. Hasta entonces, tanto la uva blanca como la tinta son verdes. A partir del envero, evolucionan de modo diferente: la blanca adquiere un tono amarillo y la negra se asemeja al rojo. Las bayas son no climatéricas, es decir, no maduran una vez cosechadas. A diferencia de otros frutos como las manzanas o las peras, el proceso está regulado por las auxinas, un grupo de fitohormonas que funcionan como reguladoras del crecimiento vegetal. Cada baya es independiente de otra en un mismo racimo, por lo que cada fruto alcanza la maduración en momentos distintos.

Equilibrio entre componentes

Durante el proceso de maduración, la uva sufre varios cambios. Primero se engrosa el fruto debido a la acumulación de agua que, en ocasiones, llega a reventar la piel si el año es muy lluvioso. También se produce una acumulación de azúcares, sobre todo glucosa y fructosa, que marcarán el correcto desarrollo de la maduración. La cantidad de azúcar que se forma durante esta fase está muy condicionada por la luz que recibe la planta; cuantas más horas de sol, mayor es la duración de la fotosíntesis y la producción de azúcares.

Durante el proceso de maduración de la uva disminuye la acidez del fruto

A partir de la sacarosa sintetizada en las hojas, que se transforma en glucosa y fructosa en la baya por acción de la enzima isomeraza, se inicia el proceso de síntesis de otros compuestos. Con el desarrollo de la baya, las vacuolas de la pulpa comienzan a llenarse de azúcares y ácidos orgánicos tartárico, málico y cítrico. Con el tiempo, se produce la síntesis de otros compuestos y disminuye la acidez total de la uva.

El proceso de respiración también varía. Se vuelve más lento en zonas de climas fríos o en racimos con pocas horas de luz. A 10ºC es casi nulo, a partir de 25ºC aumenta y a los 35ºC se alcanza un coeficiente de respiración de 1-2 µmol (micromol, cantidad de moléculas) de CO2. Las proteínas de la baya aumentan desde el envero hasta el momento de la cosecha, mientras que algunos aminoácidos como la arginina disminuyen.

En cuanto a los compuestos aromáticos, los terpenos, uno de los más importantes, se encuentran unidos a los azúcares, se liberan de ellos durante la fermentación y expresan de esta forma sus aromas característicos. Por último, los compuestos fenólicos experimentan un comportamiento que depende de la familia y del tejido de la baya. La concentración de los taninos disminuye en la semilla debido a un proceso de oxidación, la coloración de las semillas cambia y pasa a ser marrón.

Sobremadurez

La madurez fisiológica o sobremadurez empieza cuando la uva ha alcanzado su tamaño máximo y la concentración más alta de azúcares. En este punto, el grano empieza a disminuir de tamaño, la uva pierde agua y se pasifica. A partir de este momento, deja de sintetizar compuestos enolicamente deseados para la elaboración del vino. Se registra un aumento en la concentración de los componentes de la pulpa, en especial de los azúcares (a causa de la deshidratación de la uva), y los compuestos aromáticos y fenólicos empiezan a degradarse. Sin embargo, es preferible iniciar el proceso de elaboración del vino con un principio de sobremaduración.

Durante este proceso, el grano se separa de la planta y, por lo tanto, queda a merced de agentes externos como la lluvia, la humedad o la aparición de hongos. Se produce una marchitación del grano y un notable deterioro de la baya.

DETERMINAR EL MOMENTO DE LA COSECHA

El momento de la cosecha es crucial para la calidad del futuro vino. Cuando la uva se recoge verde, sin alcanzar la madurez necesaria, el vino es ácido, con marcadas notas herbáceas y falto de los aromas que caracterizan a los diferentes caldos. En estos casos, las uvas producen líquidos con poco color y astringentes ya que la acción de las enzimas es escasa y el vino no clarifica bien. Un ejemplo son los vinos blancos. Por el contrario, cuando las uvas están sobremaduras, se obtienen productos faltos de acidez, fáciles de oxidar por el alto pH y con ausencia de aromas. Es fundamental determinar el momento idóneo para la cosecha de la uva. Uno de los criterios que sirven de guía es la madurez tecnológica, basada en la medición de los ácidos y los azúcares de la pulpa, aunque no tiene en cuenta el estado de madurez de la piel y la semilla. En zonas cálidas, el proceso es más rápido que en el resto de los componentes del grano, se llega a la madurez tecnológica con la semilla y la piel inmaduras. El resultado son vinos herbáceos, ácidos y con poco color.

Otra manera de determinar el momento óptimo para la cosecha consiste en fijarse en la evolución de los "G.G". Muchos aromas se encuentran en forma de precursoresglicosídicos (G.G). La determinación del nivel de precursores totales en las uvas proporciona información del panorama aromático en el momento del análisis y permite determinar la madurez de las uvas.